
Ganar al Mallorca, y encima en su estadio, siempre es un placer. Es uno de los caramelos que nos puede ofrecer la Liga cada año, y que normalmente no sabemos aprovechar.
Hoy lo hemos hecho, y encima de una forma contundente. No por el resultado (0-1), sino porque el equipo ha ido a por el partido en todo momento, todo y ser un hombre menos desde el primer tiempo.
Este es el Espanyol que necesitamos como visitante. Y que nadie me venda la moto que en San Sebastián o Villareal jugamos igual, porque no es cierto.
Hoy el equipo ha jugado muy bien y se ha conseguido el objetivo. Esperemos que esto sirva para marcar una línea.
No hay comentarios:
Publicar un comentario